La magnífica obra del ingreso a Posadas parece estar lista, pero todavía nadie se tomó los tiempos en los 50 metros de agua cristalina

La pileta está lista, pero sin uso. Foto: Joaquín Galiano (El Territorio).
Si pasás por el ingreso a Posadas desde el Arco, es inevitable sorprenderse con la obra a la izquierda. Si salís de la Capital y vas a Itaembé Guazú, a la derecha te vas a encontrar con el CePARD, su pista de atletismo, su gimnasio de lucha, canchas de hockey. Y también con la pileta, que parece estar lista, pero que no se usa. ¿Por qué? ¿Qué le falta? ¿Cuál es la traba?
Si bien es difícil acceder a información precisa, lo cierto es que en marzo se llevó a cabo una inauguración oficial que parecía ponerla en marcha. Tras el corte de cintas, hubo brazadas para las cámaras, algún nadador destacado de la provincia dando las primeras vueltas. Y hasta ahí. No hubo permiso para nada más.
Ahora bien, la pileta está, el agua se muestra cristalina, alguien la cuida y crece la expectativa para saber cuándo será el momento de registrar los primeros tiempos en los distintos estilos. Si bien es difícil conseguir información, dealtovuelo.com pudo averiguar que faltan cuestiones técnicas. ¿Cuáles? No hay precisiones.
Los lanzadores están listos, los carriles también. Está pintada, el agua apta, pero los accesos están bloqueados. A la pileta no se puede llegar si no hay autorización. ¿De quién? Tampoco se sabe.

La obra se impone en la geografía del Cepard. Foto: Joaquín Galiano (El Territorio).
Cautela y silencio
dealtovuelo.com buscó, preguntó, tocó contactos y ahondó en la búsqueda de datos certeros. Preguntas simples: ¿Cuándo? ¿Qué falta? ¿por qué no se termina?
“Está terminada”, contestó una de las fuentes consultadas. “No se usa porque faltan detalles de baños, vestuarios, control médico y los accesos”, amplió, aunque prefirió hacerlo desde el anonimato. También expresó que hace unas semanas llegaron desde Córdoba para ponerla a punto. “Los encargados de los filtros vinieron, pero justo les tocó una semana de mucha lluvia y no pudieron continuar con el trabajo. Se tuvieron que volver y prometieron regresar lo antes posible”, explicó.
Aprovecharla en verano
Si bien en la provincia son pocos los días de frío intenso, la idea de ocupar la pileta durante el verano no tiene grietas. Se la necesita en lo inmediato para que no se pare de nadar en la misma. Está todo listo, salvo unos pequeños detalles que, de manera inentendible, todavía no se han realizado. Puede que una serie de llamados telefónicos ponga en marcha un avance, de los tantos que se dan, considerable en el deporte provincial.
Una necesidad
“La necesidad de la pileta olímpica es de carácter urgente. Primero que nada no podemos tener programas masivos de enseñanza porque no hay piletas públicas y cada vez tenemos más chicos que no saben nadar”, explicó Gustavo Breitenbruch, uno de los máximos exponentes de la natación en Misiones.
“Esto primero que nada afecta a la seguridad y en segundo lugar a nuestros nadadores se les hace muy difícil lograr valores de rendimientos como los tuvimos porque hoy en día la mayoría entrena en pileta de medida olímpica y nosotros seguimos en la semi olímpica”, graficó el entrenador y sentenció: “La diferencia es demasiado marcada”.
“El hecho de no contar con un natatorio para enseñanza masiva afecta a todos los deportes acuáticos porque primero hay que saber nadar, hasta incluso para ir a pescar. Por eso es tan necesario terminar el parque acuático”, pidió Breitenbruch.