¡Qué huevos, Mitre!

El Auriazul la pasó realmente mal ante Victoria de Curuzú Cuatiá. Lo perdía, pero lo empató en la última para avanzar después por penales a la final de zona.

Por Emiliano Andreoli (dealtovuelo.com). Lo que sufrió Mitre no tiene nombre. Lo que transpiró para avanzar de ronda en el Torneo Regional no se olvidará jamás. Y el tiempo que tiene para el disfrute es tan escaso que deberá levantarse este lunes con la firme intención de seguir con vida en búsqueda del ascenso.

Ya sabe Mitre que jugará ante Defensores de Evita para ver quién pelea por el ascenso. Pero en el mientras tanto tuvo que ir hasta los penales para dejar en el camino a Victoria de Curuzú Cuatiá. Los de Penissotto hicieron casi todo bien, pero a poco del final se les cayó el castillo de naipes y el fútbol, que tantas veces es tan injusto, ésta vez eligió premiar al que siempre buscó, al que hizo el gasto y encontró su merecida clasificación.

El Tito Cucchiaroni se mostró repleto como hace años no pasaba. La gente se acercó a mirar el partido de un Auriazul que convoca como nunca y que después de este glorioso domingo lo hará todavía más el próximo, cuando Mitre reciba a los formoseños.

Golpe para sufrir

Retamozo, en una de las pocas chances que tuvo Victoria, encontró el gol para la visita cuando el reloj marcaba 28 de la primera parte. La sorpresa fue tal que a Mitre le costó asimilar el golpe. Recién en el segundo tiempo pareció darse cuenta de que el partido se le podía ir de las manos y, cuando todo Victoria ya festejaba la clasificación. Sí, Victoria festejó la clasificación, que al final se le escapó.

En el complemento, los de Salinas entendieron que se les estaba escapando el sueño de ascenso. Fueron con todo lo que tenían a buscar la clasificación y, cuando parecía que todo era en vano, apareció un centro exquisito de Roa para que Pinti Álvarez responda con el gol del empate la esperanza depositada en él. Qué frentazo metió Pinti para darle vida a Mitre. Inolvidable, justo antes del pitazo final, justo antes de que Quijano, el arquero visitante, esté a punto de convertirse en el héroe de Curuzú Cuatiá. Por Pinti, eso no pasó ni pasará.

Pinti metió un cabezazo inolvidable para darle vida a Mitre.

Los penales

Penissotto hizo la de Van Gaal en 2014: Cambió al arquero antes de la tanda de penales. Sacó a la figura del partido para poner a un frío De los Reyes, otro de los que estaba festejando antes del pitazo final. De los Reyes no pudo ni con Silveira, ni con Garay que la picó, tampoco con Klyniauk, menos con Richard y vio cómo Almirón marcó el quinto y último penal, el de la clasificación. El de la justicia

Para Victoria el yerro llegó del lugar menos pensado. Quijano había sido la figura, pero muy cerca terminó Cóceres, el 10 que manejó los tiempos de Victoria durante todo el partido, pero que el primer penal de la visita lo mandó a las nubes.

Almirón se hizo cargo del quinto penal y no le dio chances a De los Reyes.

El fútbol, claro está, muchas veces es injusto, pero este domingo en Rocamora hubo una marcada dosis de justicia para un Mitre que, más que nunca, duerme pensando en el ascenso.

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